Este es el 10º aniversario de desafío en la cocina, y tenemos que celebrarlo como se merece!!.
Aunque tengo que decir que para mí es una celebración triste, pues hace unos días nuestras boss nos comunicaron que, después de mucho meditarlo, habían decidido cerrar ésta etapa. Y nuestro grupo Desafío en la Cocina termina con este desafío.
Han sido 10 años muy bonitos, donde he aprendido recetas de las que ni siquiera había oído hablar. Un grupo donde hemos compartido muchas cosas, nos hemos reído, y ayudado unas a otras.
Quiero dar las gracias a todas las boss. Las que están ahora, Carolina y Toñi; y también las que estuvieron: Mari Luz, Rocío, Carmen, Mila, Nina y Mabel.
Agradeceros a todas lo bien que lo habéis hecho durante estos 10 años.
Os lo habéis currado muchísimo, mes a mes, para que todo funcionara a las mil maravillas.
Lo bien que lo hemos pasado con las pistas, para poder descubrir de qué desafío se trataba cada mes, o cuando organizabais el amigo invisible por Navidad, o la galleta viajera...
Cómo nos hemos divertido y a cuánta gente bonita he conocido.
Gracias y mil gracias!!!
Cavity cake es una tarta que no conocía y está divina, yo la he hecho en dos días. Primero el bizcocho y al día siguiente las cremas.
Vamos con ésta rica tarta!!
Ingredientes:
Para el bizcocho: Molde de 15 cm. de diámetro
250 gr. de azúcar
150 gr. de harina
50 gr. de cacao puro sin azúcar
2 cucharaditas de levadura
2 huevos talla M
150 ml. de leche
1 cucharadita de extracto de vainilla
150 ml. de agua hirviendo
Para la crema de yogur:
agua para hidratar la gelatina
1 yogur natural sin azúcar
70 gr. de nata para montar
60 gr. de leche condensada
Para el ganache de chocolate:
160 gr. de chocolate para postres
Para el relleno de mermelada:
2 hojas de gelatina
Para adornar:
frambuesas
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º grados y engrasamos el molde.
En un bol tamizamos la harina, el cacao y la levadura. Reservamos
Batimos los huevos el azúcar y aceite hasta que estén integrados. Incorporamos la harina, el cacao y la levadura. Cuando la mezcla sea homogénea, añadimos la leche y la vainilla; agregamos el agua hirviendo y batimos de nuevo.
Aviso que la masa queda muy líquida.
Ponemos la masa en el molde y horneamos durante unos 25-30 minutos o hasta que los bordes del bizcocho se separen del molde.
Esperamos a que se enfríe antes de desmoldar sobre una rejilla, porque cuando está caliente es muy frágil.
Es un bizcocho super tierno y esponjoso, del libro "Tarta perfecta" de Alma Obregón
Desmoldamos e igualamos el bizcocho cortando el copete con un cuchillo de sierra.
Como se trata de un bizcocho cavado, vaciamos el centro con un aro de emplatar. De lo que sacamos cortamos un disco para ponerlo en la base del bizcocho y luego rellenamos con las cremas que queramos. En mi caso lo he rellenado con una crema de yogur, ganache de chocolate y mermelada de naranja amarga.
Crema de yogur:
Hidratamos las 3 hojas de gelatina en agua fría durante 10 minutos.
Escurrimos un poco la gelatina, la ponemos en una taza y la metemos en el microondas a máxima potencia durante 15 segundos.
Ponemos el yogur, la nata y la leche condensada en un cuenco. Mezclamos con unas varillas durante unos 2 minutos.
Añadimos la gelatina líquida que hemos metido en el microondas y volvemos a mezclar bien.
Incorporamos unos 200ml de la crema de yogur en el hueco que hemos cavado en el bizcocho.
Lo metemos en la nevera unas dos horas.
Mientras tanto hacemos la ganache:
Ponemos en un cazo a calentar la nata y cuando empiece a hervir, echamos encima el chocolate cortado en trocitos.
Removemos hasta que se derrita el chocolate y la mezcla sea homogénea.
Cuando está templada la incorporamos sobre la crema de yogur y volvemos a meter la tarta en la nevera durante unas dos horas.
Ahora preparamos la mermelada:
Hidratamos las 2 hojas de gelatina en agua fría unos 10 minutos.
Ponemos la mermelada a calentar en un cazo, escurrimos la gelatina y la incorporamos a la mermelada.
Removemos durante unos dos minutos, retiramos del fuego y cuando esté templada la ponemos sobre la ganache. Metemos en la nevera de nuevo hasta que la mermelada esté cuajada.
Ya solo nos queda adornar la maravillosa tarta como más nos guste. En mi caso ha sido con nata y frambuesas
Rica, rica de verdad!!!
Vamos a ver los desafíos de mis compañeras. Picad aquí
Hasta siempre compañeras!!!